Fue un viaje familiar. Lo que más deseábamos era descansar del ajetreo caraqueño, despejarnos de tantas noticias y dedicarnos exclusivamente a escuchar el sonido de las olas del mar mientras comíamos empanadas......y a eso fue a lo que nos dedicamos: a olvidar, a despejar, a disfrutar de las playas, como esta, llamada Playa Guacuco en donde se consiguen guacucos (moluscos) tan solo pisando fuerte en la arena:


También aprovechamos para disfrutar de los atardeceres en Juan Griego, que son para inspirar a cualquier pintor:

En fin, logramos nuestro objetivo: descansar y reconciliarnos con la Venezuela bonita.Aquí les dejo un video de Playa Manzanillo, para que escuchen por un momentico el sonido del mar caribeño :-)